Camilo José Cela


Por el conjunto de su obra escrita, el Opus Dei tacha a Camilo José Cela de excesivamente sensual.



Mazurca para dos muertos


Prohibido por aberrante:

"Es un mundo "natural", entendiendo lo natural, desde luego, por lo instintivo elemental y con frecuencia degradado. Lo que se aparta de esa "naturaleza" (que abarca fundamentalmente el sexo brutal, con un amplio muestrario de aberraciones, y, como complemento, lo macabro y lo escatológico) es juzgado negativamente; en particular todo lo que suponga espiritualidad, lo que supere la animalidad cotidiana aunque sólo sea humanamente (la existencia de ideales nobles, por ejemplo, o de virtudes humanas que apenas se encuentran en la novela)".


La colmena

Prohibido por sórdido:

"Aun aceptando la realidad de la parcela social y humana acotada por el autor, y la caracterización de cada personaje (sin considerar ahora los esperpénticos), resulta enormemente significativo el hecho de que casi todos los personajes sean socialmente anodinos, torpes o chapuceros en su profesión, con enfermedades físicas o taras morales, envueltos en problemas familiares, siempre cansados y abrumados, con apuros económicos o deseos insatisfechos. Según Cela la novela no quiera ser "más —ni menos, ciertamente— que un trozo de vida narrado paso a paso, sin extrañas tragedias, sin caridad, como la vida discurre, exactamente como la vida discurre".

*Los fragmentos de texto han sido extraídos de los comentarios que se incluyen en el índice de recesiones del Opus Dei